Echarte de menos no entraba en mis planes,
ni tan siquiera podía imaginarlo,
no había pasado el tiempo suficiente
para sentirte tan cerca de mí.
Confundida me doy cuenta,
de que sí, realmente te voy a extrañar,
pasarme horas, días y semanas sin
tener noticias tuyas será como estar sin mis letras.
No lo planeé, surgió, y esta noche has aparecido,
sí, en mi sueños, no se si es buena o mala señal,
pero ahí estabas, retumbaba tu voz e intentaba imaginarte.
Volaba entre las nubes grises,
buscaba una cara, un cuerpo y por fin lo encontré,
la luna escondida entre las estrellas,
con sus ojos, su nariz y su boca me hacía un guiño,
intenté con todas mis fuerzas llegar a ella,
y cuanto mas me acercaba más me cegaba su luz,
era absurdo poder alcanzarla.
Cada noche mientras la luna descanse
intentaré colarme en su guarida,
sin que su luz pueda cegarme,
si consigo atraparla,
ya no te echaré tanto de menos.
